La radiografía lateral cefalométrica es una de la que se utiliza con mayor frecuencia para planificar y evaluar el tratamiento de ortodoncia. Además de ello también son muy conocidos los efectos perjudiciales que trae consigo la utilización de los rayos X, por lo que los Radiólogos están obligados a utilizar la radiación con prudencia para asegurar que la dosis absorbida por el paciente sea “tan bajo como sea razonablemente posible”. Una forma posible de reducir la dosis para el paciente, es reduciendo al mínimo el área irradiada de interés para la tarea de diagnóstico.
Recientemente, el colimador craneal anatómico (ACC) (ver figura 1), se introdujo para proteger la zona craneal y base del cráneo de la radiación. Esta zona craneal no tiene información de diagnóstico para el ortodoncista. Otra área que está en el campo de visión de las radiografías laterales sin información de diagnóstico es la región de la tiroides. La glándula tiroides es uno de los órganos más radiosensible en la región de la cabeza y el cuello. Las directrices europeas y norteamericanas indican que el uso e protectores tiroideos deben ser de carácter obligatorio para los niños y en los adultos siempre y cuando la zona de la tiroides no va a interferir con el examen.
Los protectores cefalométricos de tiroides (TCP) (ver figura 1), para proteger a la glándula tiroides durante la toma de una radiografía lateral se introdujeron por primera vez por Block en 1977 y están fácilmente disponibles. Sin embargo algunos exámenes hechos en la radiografía lateral utilizan las vértebras como indicadores de madurez esquelética (SMI), por lo cual es necesario que estos protectores protejan a la tiroides pero sin oscurecer la zona cervical.
La dosis efectiva (ED) de radiación que recibe el paciente para obtener una radiografía lateral sin la utilización de algún tipo de blindaje es de un promedio de 8.51 mSv, este valor es considerando la utilización de equipos cefalométricos digitales. Sin embargo si se utiliza el protector craneal anatómico (ACC) la dosis efectiva se reduce a un 5.39mSv, y si se le añade el protector de tiroides (TCS) la dosis disminuye aún más llegando a un valor de 4.97 mSv.
La conclusión a la que se puede llegar es que mediante el uso de los protectores craneales y protectores tiroideos que no interfieren con la zona cervical, es posible disminuir la dosis efectiva en casi un 50 % mientras que la dosis a la tiroides disminuye en un 85 %.
Figura 1. Utilización del colimador craneal anatómico (ACC) y del protector tiroideo cefalométrico (CTP) antes de la exposición de una radiografía lateral.
Figura 2. Radiografía lateral obtenida mediante el uso del protector craneal y protector tiroideo, nótese que no interfieren con ninguna estructura anatómico con valor diagnóstico.
REFERENCIA:
R C Hoogeveen, D Rottke, P F van der Stelt and W E R Berkhout. Dose reduction in orthodontic lateral cephalography: dosimetric evaluation of a novel cephalographic thyroid protector (CTP) and anatomical cranial collimation (ACC). Dentomaxillofacial Radiology (2015) 44, 20140260.
Elaborado por : C.D. Luis Alberto Cueva Principe, Mg. Esp. C.D. Andrés Agurto Huerta